Las instalaciones, las habitaciones y su estado son excepcionales. Desayuno variado y bien organizado. Información muy detallada.
Parking propio.
Todo limpio y muy amplio. Además estuvimos casi solos.
A mí parecer, lo peor está en la comunicación con el/la propietari@. Nula si no contamos los mensajes automáticos (detallados, eso sí) sobre check-in, etc. Nos pasó en varias ocasiones en Islandia, y es algo que no nos agrada en absoluto. La falta de empatía y feedback.
Por ello, bajo mi punto de vista, no podría otorgarle nunca la máxima calificación.