EL Hotel es bonito pero el servicio fue muy malo; Las comidas del mediodía son en la piscina, en una hora no apareció nadie,cuando apareció un camarero nos dijo un momento y desapareció 20 minutos,había dos mesas en la piscina y una solo tenia dos sillas,una familia se canso de esperar y nosotros al final conseguimos comer un bocadillo después de muchas esperas, la bebida después de comer etc... En el desayuno, a las 9h de la mañana ya no había ni reponían, ni huevos ni beicon ni croissants , protestamos y nos dijeron que ahora nos los traían y al cabo de 20 minutos nos dijeron otra vez que no era posible q la cocina estaba cerrada.La habitación, la limpieza es un poca escasa, no nos cambiaron los vasos en 5 días, no reponian la nevera ,ni tenia repuestos en recepcion, y el bar estaba cerrado.El parking es caro