En general fue buena, las instalaciones son muy bonitas, con muchos servicios para entretenimiento, muchos de ellos de pago.
Nos sorprendió una piscina(jacuzzi) que estaba abierta hasta las 10 pm , estuvimos en verano y era ideal para usar después de una larga caminata.
Realmente ni disgusto es porque el servicio de limpieza diario de la habitación, no es real como lo ofrecen. El segundo día nos dimos cuenta y dijeron que lo solicitáramos y limpiaron pero al siguiente día, aunque lo solicitamos, nadie fue.
Para desayunar, “el restaurante disponible” es muy deficiente y calidad precio, no compensa, nosotros desayunamos muy abundante y rico en “Víctor” en el restaurante Brunch.
Nos sorprendió que el hotel estaba muy solo, por una parte ideal, pero por otra, se extraña el movimiento de huéspedes y personal del hotel, sobretodo en pleno verano.
Es verdad que está a 1.5 h de la entrada a Gran Teaton, pero es un paseito agradable con el marco natural que acompaña en el viaje