Llegamos el primer día pensando que había consigna para las maletas pero solo hay tres huecos sin posibilidad de reservar, nos dijeron que solo están disponibles a primera hora de la mañana y te dicen que vayas a la estación central a dejarlas, donde el coste es de 9-11 €
Cualquier problema no hay nadie con el que hablar, no hay recepción a ninguna hora menos a las 15 que es cuando se colocan las llaves de las habitaciones en la caja.
En el apartamento no hay mantas, no se puede regular el aire/calefacción, y ponen una cajita con cápsulas para hacer cafe entiendo vacía.
Estuvimos cuatro días hospedados, ni un solo día se limpió la habitación o nos dieron otro cambio de toallas y sábanas.
Lo más positivo que tiene es su ubicación muy cerca de la Gran Plaza y de la estación central.