No es un hotel, es un hostal. Lo único bueno que tiene es su ubicación. Las instalaciones son muy antiguas, el baño de la habitación pequeño, frío, bañera con cortina que se pega, las toallas deberían actualizarlas porque están muy usadas. El último día nos dimos cuenta de que las sábanas tenían mancha de sangre de anteriores huéspedes que no había salido al lavarlas y aún así las habían puesto en nuestra cama. Se escucha muchísimo el ruido y a pesar de ser un hotel de no fumadores, todo el hotel huele a tabaco. El precio que se paga no corresponde a las instalaciones, y las fotos no se corresponden con la realidad.