Muy bonito el Ryad y bien situado ya que está en una calle tranquila muy próxima a la puerta azul. Tiene un patio interior con una piscina que supongo será muy útil cuando el calor apriete, ahora , que es invierno, sencillamente el efecto del agua es precioso.
Excelente la atención del personal, 10/10. Cocina para las cenas imaginativa y buena.
Mi habitación, suite, y dentro de lo que ofrecen los ryads normales, era cómoda y estaba bien decorada. Sin lujos pero te traslada a otra época.
Sería bueno que se mejorarse la insonorización ya que las conversaciones en el patio de algunos huéspedes ruidosos se te «meten en la cama.»