ación, buenos desayunos continentales, el personal es amable aunque la segunda noche pedimos una toalla extra que nos faltaba y nunca llegaron con ella, pedimos toallas para la piscina, tardaron en dárnoslas y nos pusieron a llevarlas mojadas a nosotros mismos a la recepción, más que mala atención nos pareció pereza del señor de la recepción, la habitación no tenía buena ventilación y tenía un olor a húmedo todo el tiempo, es la primera vez que venimos con mi familia a Cartagena y la verdad a Bocagrande no volvería, mucho edición enorme pero las infraestructuras públicas como calles, paseos y playas son un total desastre, agujeros por todas las calles, suciedad, muy poca inversión, los chiringuitos de las playas parecen tugurios hechos de latas cual invasión, no hay por donde pasear cerca del mar, y las playas como tal no dan ganas de usarlas por el desorden y suciedad que hay, la verdad muy decepcionante, para los que vienen con fines de conocer más la ciudad les recomiendo quedarse en el centro y si quieren playas bonitas vayan a alguna isla no a bocagrande.