Estancia de una noche ya que se celebró allí la boda de unos amigos, todo lo relacionado con la boda de 10, especial mención a una de las camareras, que me disculpe pero no recuerdo su nombre, era morena y bajita (descriptivamente hablando), su amabilidad y simpatía fueron más allá de lo que corresponde en este tipo de eventos en el que todo el personal en general es muy amable. No sé si será del personal fijo o de refuerzo pero repito muy amable y con una sonrisa natural no forzada.
Respecto a la habitación desaconsejo la planta 0 por que al terminar la celebración de madrugada, a las 8 empieza el personal a desfilar por el pasillo charlando entre ellos y con carros y no hay quien pueda dormir. La habitación muy limpia y cómoda, lo malo que daba a la calle y no había forma de tapar la luz que se colaba entre las 2 persianas. Desayuno tipo bufe muy variado y rico.