El hotel está bien, pero necesita mejorar en cuanto a mantenimiento.
La primera mala impresión fue al llegar a la habitación, porque la puerta del mueble del minibar estaba descolgada y caída. La colocó mi marido.
Luego por la noche quisimos cortar el aire acondicionado y no había manera de hacerlo, ni siquiera quitando la tarjeta de La Luz, así que decidí llamar a recepción para que me explicaran como hacerlo, pero el teléfono no funcionaba...!!! (Ninguno de los dos que había).
Al final tuve que vestirme y bajar a recepción, no una sino dos veces. La chica, muy amable, la segunda vez subió conmigo a la habitación y consiguió cortar el aire, pero a la mañana siguiente otra aventura para volver a encenderlo....
Desastroso el tema del aire acondicionado....