Buen hotel. Las habitaciones tienen su encanto: techos altos, camas cómodas, armario enorme, muy limpio y con vistas a la plaza de la ciudad en pleno centro.
Se aparca bien, pero con las limitaciones del parquimetro. Solo hubo una cosa que no me gusto: la television no permite que conectes tu propio usb ni que conectes con tu servicio de streaming/chromecast. A dia de hoy, para los que somos extranjeros y estamos de ocio en Chequia sin conocer wl idioma local, se hace imprescindible poder usar la television para proyectar tus propias series , peliculas etc. Una lastima.
Otro de los puntos: la habitacion tenia una bañera enorme... pero uno no podia ducharse sin salpicar todo el baño... hubiera estado mejor una ducha enorme.