El hotel en general es muy limpio, muy bonito, de decoración minimalista y de construcción muy nueva, el Restaurant estaba en remodelación, aunque queda algo retirado entre las ciudades de Rionegro y la Ceja, por todo el frente pasan los autobuses de la línea transportes unidos con muy buena regularidad, podías tomar uno de estos para ir a la ceja y de allí al terminal del norte en Medellín, o a la ciudad de Rionegro del otro lado de la avenida, todos con precios asequibles. La atención de sus recepcionistas y el personal fue excelente, el clima frío, paisaje muy bonito de muchísimo verdor, desayuno muy fresco aunque no tienen mucha variedad (bien para pocos días), en general excelente relación precio valor, si vuelvo a ir, me quedaré de nuevo en este hotel.