Realmente un lugarcito muy acogedor en el corazón de Habana Vieja. Su equipo te hace sentir en casa desde que llegas. Me trataron excelente, en recepción, en el restaurante y hasta los propios dueños del hostal.
Debo decir que la relación precio calidad de la habitación es buena, es aseada. El hotel es idéntico a como se ve en fotos, las obras de arte exhibidas son muy lindas; pero reitero, que lo más importante es el trato de su equipo, te dan confianza, te ayudan a organizar tu estancia y a hacerla agradable. Sin duda, lo volvería a visitar.