La zona del desayuno y el desayuno genial, aunque había muchos mosquitos. Pero las habitaciones eran más bien mediocres. Hacía calor, no podrías abrir la ventana porque no había mosquiteras y entraban toda clase de bichos, había mucho ruido del propio hotel. La limpieza en las sábanas tampoco era correcta, se veían diferentes mosquitas. El secador de la habitación no iba, aunque pedimos uno y nos lo facilitaron. Para lo que era el hotel y el precio que tenía, no me pareció que relación calidad precio fuese adecuada