Buen hotel, cerca del autobús, de supermercados, de la playa, y con buenas instalaciones, lo malo del hotel, que solo hablan ingles y si no les hablas en ingles no te atienden. La limpieza buena, pero en dos ocasiones entraron en la habitación estando nosotros dentro para dejar las toallas que no habían dejado antes. El Buffet desayuno impecable, nada malo que decir al respecto. También el hotel esta cerca de una zona de fiesta, lo malo de esto, es que había muchos huéspedes que llegaban a las mil, haciendo ruido, molestando en la piscina, etc. También a remarcar que salto la alarma de incendios en seis días tres veces, dos de ellas a las 5 a.m. del mismo día. En nuestra habitación teníamos terraza y los pisos de arriba se dedicaban a tirar las colillas de los cigarros a nuestro patio, donde teníamos la ropa tendida. Pese a las incidencias hay que decir que no tiene malas instalaciones, que la habitación era muy buena y la situación igual.