El lugar super bonito, ya lo conocía, me encanta todo, el personal super amable, pero en el restaurante el nuevo dueño del hotel porque ya no es del grupo misión tratando horrible a los empleados gritándoles groserías, muy desagradable no volveremos, para nada les recomiendo si está el, nos queríamos quedar otro días pero después de eso mejor nos fuimos, una lastima q se abuse de la necesidad de trabajo de las personas q aparte son super amables