Horroroso hotel en Abidjan, en el barrio de Plateau, muy cerca de la zona de negocios y gubernamental. El hotel estaba en reformas, con obras, al mismo tiempo, en las áreas comunes y en las habitaciones. Asimismo, el hotel está lleno de humedades (con goteras incluidas en las habitaciones), un olor espantoso a humedad y con habitaciones y baños viejos, aunque limpios. Las áreas comunes son lamentables, con un aire acondicionado siempre muy fuerte y una comida mala y cara (acabé ingresado en el hospital varios días por una intoxicación alimentaria producida en la cena del martes 19 de mayo de 2015 en el restaurante del hotel). El servicio es de lo poco, por no decir, lo único, que se salva del hotel. He visitado otros hoteles de la misma cadena en la zona (Novotel o Pullman, también en Plateau, y merece la pena pagar más para evitar el IBIS).