la estancia fue buena. El hotel es cómodo y la ubicación es excelente. Si bien yo estuve en habitación superior. Las normales no son dignas de un hotel de cuatro estrellas. Tienen detalles feos, como que había crema hidratante en botecitos a la llegada y en seis noches no la repusieron ni una sóla vez. A la llegada me adjudicaron una habitación normal, que olía bastante mal. Bajé a decir que había reservado una superior y me dijeron que ésa lo era. Dije que no, pues he estado más veces y me volvieron a decir que era superior. Al insistir, reconocieron que no, pero que estaban completos y me cambiarían al día siguiente. Iba muy cargado y eran las tantas de la noche y no quería volver a hacer el equipaje y dejarlo un día en consigna, así que me enojé porque me habían engañado. Insistí y nada. Pedí el libro de reclamaciones y me dieron un folio en blanco y un bolígrafo. Me estuvieron mareando un buen rato sin dármelo y viendo que no cedía, enfadados, me dieron una superior. Ya digo, lo peor fue que me engañaron y si no protesto, ahí me quedo.