No se ni por donde empezar,la habitación muy hecha polvo,echo con ñapas muy mala conservación,el aire acondicionado hacia un ruido horroroso,la maneta del balcón colgando,armarios sin puertas,llegamos y el suelo lleno de arena de playa y colillas en el balcón y mi madre no pudo utilizar su máquina de oxígeno porque la corriente no daba,en el comedor quieren abarcar más de lo que pueden,colas inmensas,comida malisima y repetitiva,sin aire acondicionado muchisimo calor en un lado del comedor,las luces saltaban cada dos por tres y las maquinas de cafe dejaban de funcionar,los camareros hacian lo que podian con tanta gente y ellos tan pocos,pobres,las tostadoras dejaban de funcionar también,en plena comida más de media hora para pagar la comida por que el sistema de pago no funcionaba,lavabos sucios y vomitados,sala de cafeteria con musica no insonorizada,se oia en las habitaciones toda la musica perfectamente,con todo esto,no volveremos,lo único que vale la pena los del servicio del comedor,los animadores los del servicio de cafetería/ piscina y la chica rubia que habla español de recepción un encanto.