Llegamos al hotel ya de noche, la zona no nos gustó mucho, fuimos caminado hasta un Burger King que había cerca y aunque no nos sentimos inseguros tampoco nos gustó mucho el ambiente. No tiene parada de metro cerca, sí de autobús.
De otra forma el hotel estaba fenomenal, la habitación familiar era muy grande y el desayuno muy bueno, además a las niñas les dieron una bolsa con una especie de merienda con una manzana, un petitsuise, un zumo, Nutella.., un buen detalle la verdad.