Servicio pesimo! Nada de flexibilidad. Hasta el típico hervidor de agua q se puede encontrar en un hotel de dos estrellas, nos dijeron q eso solo es para las suites.
Promocionan su piscina cubierta y el spa, pero es solo para dos horitas y casi nunca esta abierto. Y se alquila para grupos privados y q les den a los huesoedes, incluso haciendo reserva con días de antelación.
Nada mas llegar, fuimos a cenar al restaurante, mos sirvieron pollo crudo, y almejas q apestaban.
En fin, no vuelvo ahí ni regalado.
El transporte publico, nada agradable y nada comodo.
Hay que ir con alguien autóctono, porq la isla vale la pena. Y el mar maraviloso