la comida muy buena.
el personal muy amable.
el hotel confortable, tranquilo y cerca de la mejor playa de la isla.
los buceos increibles. Alex y Laura excelentes divemaster. se esmeraron porque la experiencia de buceo fuera única.
ocurrió un frente frío en medio de la estadía y eso no impidió porque buscaran las mejores opciones para buceo.
las instalaciones cuidadas y limpias.
el agua de las habitaciones no es potable y es salobre (medio salada). esto nos afectó un poco.
en los buceos no llevaban agua ni frutas. algo básico para después de bucear.
no se incluye wifi, así que el internet se cobra por día. nos pareció un poco caro.
a pesar de que todo salió de maravilla con los buceos, depende uno de que otras personas quieran bucear para poder hacer los buceos. esto para el buceo de la tarde. es decir que si solo hay un buzo no se hace el viaje. ESTO NO ME AFECTÓ, pero pudo haberme afectado en el caso de que nadie hubiese querido bucear.
quizás falta un poco de variedad en el menú del almuerzo, sin embargo la comida estuvo muy buena.
nos pareció que los taxi en Roatán son bastante caros (esto no tiene que ver con el hotel)
en uno de los buceos que es con tiburones en otro centro de buceo (es el único que lo hace) al ser solo un buzo, tiene que costear el taxi (muy caro), ya que nadie más quería bucear allí. esto no lo dice en la página web.
en general si recomendaría tanto el hotel como el divecenter.
el personal muy amable y la atención de primera calidad. siempre atentos.