Lo mejor fue el desayuno, te lo llevan a la habitación y tienes diferentes opciones para elegir. Lo malo, las camas son muy incomodas, demasiado diría yo, necesitan un cambio inmediato. Por otro lado, el hotel se encuentra sobre una calle principal y si te toca una habitación que tenga la vista a la carretera sentirás el paso de vehículos todo el día y noche. La ducha del baño le hace falta más aseo, se veía algo de moho. La atención es buena, en general son amables. Por ubicación la próxima vez te sugeriría un poco más cerca de las atracciones principales.