Hotel muy agradable para pasar algunas noches en pleno centro de Lyon. Al reservarlo, pensé que al estar cerca de la estación la zona no sería tan buena, pero la realidad es que hay mucha vida en la plaza y da gusto pasearse por allí. En unos pocos minutos se llega a la calle de Victor Hugo, la plaza de Bellecour y la calle de la Republique, unas de las más importantes de la ciudad.
La habitación estaba muy bien (no tomé el desayuno allí), era amplia y muy cómoda para una persona. Lo único a destacar, no había mampara, sino que la ducha estaba en el suelo mismo del baño, y al ducharme el agua llegaba al WC y mojaba todo.
También destacar la amabilidad del personal. Lo recomiendo!