La experiencia fue simplemente impecable, desde el momento en que llegamos, quedamos impresionados por la belleza del lugar. El hotel está perfectamente ubicado, justo en una playa increíblemente hermosa, lo que hace que las vistas sean espectaculares. La sensación de despertar con el sonido del mar y disfrutar del paisaje desde la habitación es indescriptible. La comida fue otro punto destacado: deliciosa, variada y de una calidad excelente y el servicio fue excepcional. Sin duda, espero regresar en el futuro.