El hotel una preciosidad, en primera linea de playa, com vistas a la playa desde la habitacion.
Llevamos una perrita a la que trataron y recibieron muy bien.
El personal del hotel era variado, muchos de ellos fueron muy amables, otros no tanto.
La habitacion muy limpia con todo lo necesario y adecuado para un hotel de cuatro estrellas, pero muy pequeña, habiamos reservado una habitacion triple, y fue una habitacion doble con una cama supletoria demasiado pequeña.
El desayuno increible, muy recomendable ya que en verano se toma en la terraza con vistas al mar, practicamente en la playa.