La zona del alojamiento, Belsize, es hermosa. Es un barrio residencial, muy lindo, limpio y cercano a la estación de metro Belsize, desde la que se puede llegar casi a cualquier lugar de Londres. El problema es la vejez y falta de mantenimiento del edificio. De bonita fachada, pero sin ascensores, con pisos crujientes, limpieza incompleta y pocos servicios. El personal de conserjería si bien era atento, era difícil entablar una comunicación fluída. Siempre tuvimos contacto con el mismo señor, que tenía una forma de hablar muy rápida, confusa, llena de gestos y tics. Y a pesar de manejar nosotros bastante inglés, nos costaba mucho entenderlo, y el no hacía mucho de su parte para tratar de interpretarnos tampoco. Conclusión: excelente zona, muy tranquila y linda. Edificio y atención regulares.