Un hotel con el encanto del pasado y la funcionalidad de lo moderno. Ubicacion privilegiada, en el centro de Morelia, pero en un entorno muy apacible y silencioso, con todo el encanto de la provincia y su gente amable y alegre
Habitaciones super cómodas decoradas con muy buen gusto, con detalles muy calidos como flores naturales, un delicioso postre esperando al llegar por la noche y suempre una atenciin muy calida y esperada de su personal
Tiene un restaurant con platillos realmente deliciosos y una atmósfera encantadora para disfrutar todos los sentidos, al lado de una fuente que refresca y alegra alrededor. Jacinto, como Gerente, al igual que su equipo, se aseguran que todo esté perfecto, siempre con una sonrisa
Sin duda, un lugar para regresar... y regresar!