Cuando llegamos nos dieron las llaves de otra habitación que estaba ocupada, por lo que entramos a la habitación de otra persona con sus cosas y todo. Hicimos el reclamo y nos dieron nuestra habitación que no estaba muy limpia, las almohadas olían mal, el baño con pelos y estaba en condiciones deterioradas.
El desayuno es un caos, las mesas sucias no hay donde sentarse a comer y como no recogen los platos de las mesas no hay disponibilidad de vajilla para servirse el desayuno. Nosotros tuvimos que salir a desayunar fuera porque no habían ni platos ni tazas para poder comer, ni ninguna mesa limpia.
Pagamos 140 USD cada noche, la verdad una vergüenza el servicio que ofrecen para el costo de la habitación. Lo único que paga ese costo de habitación es la ubicación del hotel, pues realmente esta muy muy bien ubicado.