Es un buen hotel por el precio que tiene, pero nada especial. Puntos positivos: edificio bastante nuevo y moderno, personal amable, habitación espaciosa y limpia, está bastante cerca del aeropuerto. Puntos negativos: ducha con cortina (en un hotel tres estrellas, no creo sea aceptable), almohada y colchones incómodos (muy blandos, parecían desfondados), ventanas fijas (no se podían abrir para ventilar!), lejos del centro (lo elegimos sólo porque unos amigos viven allí al lado), desayuno demasiado caro (19 euros), no hay minibar ni nada en la habitación. Pero por el precio que hemos pagado, ha estado bien. Para turismo, merece más un hotel cercano al centro.