Utilizamos una habitación triple, que no era espaciosa, ni luminosa y no contaba con placares, ni comodas, ni espacio donde poner las maletas ni la ropa, sin embargo estaba prolija. Se destaca por sobre todo la ubicación del hotel y la disposición del personal para suplir la falta de comodidad y facilitar cualquier pedido que en nuestro caso fue de un secador y balanza para pesar las valijas. También se ocuparon de contratar un remise para llevarnos al aeropuerto. En caso de tener un presupuesto ajustado, se recomienda