Habíamos pedido, de forma inexcusable, una plaza de Parking. El Hotel, en su página, anuncia aparcamiento con asistencia y su precio.Al llegar, nos encontramos que era un parking público, y a unos 300 metros, sin vigilancia y que no era lo que hablamos. Muy poca seriedad. Tenían la petición y dijeron que no y que la culpa era de Expedia que no les pasó la petición, pero tenían una anotación pues yo la vi.
Muy mal ese punto.
Una pena porque por lo demás el hotel es céntrico y mono y el personal luego fue muy amable. Pero ese detalle nos estropeó la sensación de calidad y la llegada.