Estuvimos 3 dias y nos hicieron la estancia muy cómoda.
Los recepcionistas son muy agradables y relativamente eficientes, el resto de personal algo mas seco, pero también agradable.
El único pero es la falta de ascensor(solo tiene una planta, pero con un bebe y el carrito..se hacia un poco incomodo).
El acceso a la playa no es un paseo que se pueda hacer con ruedas...aunque en cierto modo puede resultar lógico.
No cenamos, pero el desayuno valía la pena...aunque quizás si variaran un pocolos productos de un día a otro, conseguirían sorprender a quien se hospeda mas de un día.
En definitiva, un lugar tranquilo y absolutamente recomendable...para volver, sin duda.