Pésima calidad de casi todos los servicios, pero sobre todo un engaño porque no cumplen las condiciones ofrecidas. Nuestras habitaciones no tenían Wi-Fi y tras reclamar varias veces nos dijeron con todo descaro que estaban en una zona a la que no llegaba internet. El domingo no limpian la habitación (pero eso no figura en ningun sitio) La piscina en invierno no esta climatizada, según sus propias mediciones no llegaba a los 24 grados, que es el mínimo establecido. Y aparte de todo eso objetivo, entre otras valoraciones es el desayuno aunque estándar en las cosas que ofrece, es de pesima calidad. Hay zumos envasados y luego esta eso que este hotel ofrece. Lo mismo pasa con lo dulce y lo salado. Se nota que lo único unico que les interesa es ahorrar costes, aunque en el precio no se ahorran nada. Me dio. mucha pena por los trabajadores que intentaban ser diligentes, pero poco podían hacer.