Hotel estupendo para españoles, pues su personal son casi todos paisanos. El servicio es muy bueno, sobre todo, Hector, el chico del restaurante. Muy atentos para ayudarte y aconsejarte. Las habitaciones están correctas, con una ducha muy amplia. El wifi llegaba algo escaso. El desayuno está muy correcto. Para visitar Berlín está algo a desmano; pero nosotros lo hicimos en coche de alquiler, aparcando en el parque de Tiergarten sin problemas, junto a la puerta de Brandenburgo. Pensabamos usar transporte público, pero hablando con Hector nos lo aconsejó, lo cual fue un acierto.