La habitación en general está bien, limpia y arreglada, pero no se puede obviar que huele a condensación y después de tres días, el olor se impregna hasta en la ropa. No se puede abrir las ventanas para ventilar. Estuvimos tres días y el último al regresar a la habitación, nos dimos cuenta que había desaparecido del baño , el cepillo eléctrico y un bote de acondicionador de pelo. Dimos parte en la recepción, preguntaron al personal de limpieza y han quedado en contestarnos vía mail, aún seguimos esperando.