En general, no me agradó. El baño tenía telarañas, una de las camas no tenía las patas bien aseguradas y se abrían, de haber dormido allí, hubiese acabado en el suelo, el lintel de la ventana estaba con polvo y la cortina parecía un pedazo de tela. Al llegar, no podía verse ningún canal en la televisión, pero luego lo arreglaron. La comida del restaurante estaba insípida, los gatos y las moscas paseaban como si estuviesen en su casa, incluso los gatos se subían a los asientos y hasta querían subirse a la mesa. Pará el precio pagado, casi 500 soles por 2 noches, mejor hubiese buscado un hostal.