La zona es muy tranquila y está muy cerca de la playa (si bien esta no es ni mucho menos de las mejores de Ibiza, el personal del bar/restaurante de la tarde lo mejor, eso sí nos dimos cuenta que a la piscina, que se encuentra abierta para poder acceder a la playa por un pasillo, se venían a bañar un grupo de chavales bastante mal educados que molestaban a los huéspedes, yo tuve un par de palabras con alguno de ellos, y nadie controlaba esto ni los ponía en su sitio cuando molestaban, fue el único lunar de nuestras vacaciones.