Estuvimos del 24 al 26 de febrero y del 28 al 2 de marzo. En la primera ocasión, no había toallas en la habitación y la segunda noche sonó la alarma a las 3:45 de la mañana (puedo entender que fue causa ajena al hotel, pero ni una disculpa). En la segunda estancia(la tenía reservada con antelación, porque en caso contrario no hubiéramos quedado en ese hotel) en la habitación había migas en el suelo y un palito del café. Lo comentamos y se disculpan, pero no mandan a nadie a limpiar, por lo que supongo que no tienen servicio de mantenimiento. Añado que en ambas ocasiones los inodoros estaban amarillos, por lo que deduzco , además, que la limpieza diaria no era precisamente en profundidad, por lo que tomaron tal color.