La ubicación es muy buena, se puede ir caminando a varios templos, museos, galerías, etc. Las áreas comunes tienen un decoración moderna. El cuarto es un poco pequeño pero no es un problema y tiene vista sin edificios tan cerca, lo que da amplitud.
Quizás lo único raro es que en el piso de la calle no hay nada, es solo tránsito para ir al piso 8 donde está el Lobby.