Está situado en el corazón del centro histórico. La habitación es preciosa, moderna, bien insonorizada, consigues oscuridad absoluta para aquellos a los que le molesta dormir con luz como a mi y tiene todas las comodidades que puedas necesitar, incluso unas bebidas de cortesía lo cual no es muy habitual.Solamente comentar el espejo del WC está a la altura de la media croata y no para gente de estatura mediana(ni yo ni mi pareja nos veíamos más que la frente(anécdota divertida sin más) pues hay varios espejos en la habitación :)
Las sugerencias del propietario sobre donde ir, comer , visitar, playas etc, fueron totalmente acertadas.GRACIAS X HACER NUESTRA ESTANCIA PERFECTA.