El check in fue rápido, aunque yo había solicitado una habitación para 3 personas porque ofrecía una cama matrimonial y un sofá cama, nosotros éramos dos, mi papá y yo, se suponía él dormiría en una cama, pues es una persona mayor y necesita su espacio, y yo ocuparía el sofá cama, pero cuando pedí que me lo arreglaran para dormir me dijeron que no se podía, que porque solo éramos 2 personas. No sé con qué criterio ni porqué decidieron eso, si yo reservé para 3 personas. Eso me molestó bastante, veníamos de un viaje bastante largo y estábamos muy cansados, y yo pensaba descansar en el sofá cama, en donde tuve que dormir sin poder abrirlo y ponerle una sábana. No sé con qué derecho decidieron si me daban, o no, para 2 o 3 personas, mi reserva era para 3 porque así yo lo solicité, y el cual iba a pagar yo. La comida bien, sobre todo la entrada de las ensaladas, muy rico, el segundo plato estaba bien, nada más. Los postres no me gustaron, pero eso ya es gusto de cada quien. Las personas de la recepción muy amables.