Nos alojamos 2 noches en 2 habitaciones. Cuando llegamos las habitaciones no estaban preparadas así que pedimos algo para comer (cocina abierta hasta las 22h). El personal muy amable. Nos dieron un upgrade para una habitación, pero a la noche siguiente nos pidieron que dejáramos esa habitación porque tenía una reserva de última hora, con lo que la cambiamos otra vez. Mal gestionado y desorganizado, aun así nos dio igual. Reservamos con ellos el transfer del aeropuerto de Da Nang hasta el hotel, con lo que a la vuelta también lo reservamos para volver al aeropuerto, nuestro vuelo salía a las 8.30am, así que lo pedimos para las 6.40 am y que nos diera tiempo a desayunar. El transfer dura unos 40 minutos hasta el aeropuerto. Llegó el taxi pero la recepcionista se lo dio a otra pareja y nos dejó sin taxi con la excusa de que no cabría nuestro equipaje allí (cuando ella sabía que necesitábamos un taxi con maletero grande porque viajamos con un bebé, su carrito y maletas grandes y ya le habíamos contratado a ella el viaje de ida con esa petición). Después de excusas varias, conseguimos que llegara el taxi a las 7.12am, 22 minutos después de la hora que habíamos reservado, nos ofreció devolvernos la mitad del transfer pero no lo aceptamos. El resto de la historia de las carreras por el aeropuerto con nervios, la abuela, el niño, las maletas y demás, mejor me la ahorro. Cogimos el avión por los pelos. Muy mal.