El hotel está magnificamente situado, muy cerca del palacio Hofburg, de la Ópera, del Kursalon, de la catedral de San Esteban... Y muy cerca de la estacion de metro de Oper!
El hotel ofrece desayuno incluido en la estancia y es un desayuno bufet muy completo y variado, una lástima que no ofrece servicio de restaurante, aunque al estar en una zona tan céntrica, hay muchos restaurantes para todos los bolsillos cerca.
La habitación era para una persona y razonablemente amplia, el baño amplio y completo.