Me hospedé en una habitación mixta de seis, en el edificio que esta frente al central y no era muy cómoda, muy poco espacio entre las camas. Nos quedamos sin agua en el baño y el pasillo se inundaba, no obstante el hostel lo solucionó cuando lo pedimos.
No tiene muchos espacios comunes para compartir con otros. El único es el bar, donde la música suele estar alta, y al lado de la cocina que generalmente todos la usamos para cenar y se congestiona, nada más. La cocina era amplia pero no tenían vasos, platos y cubiertos suficientes, la heladera estaba repleta y olía mal, no había organización al respecto.
Los empleados del hostel tenían muy buena onda y buena predisposición a ayudar.