Elegí este hotel porque además de estar bien evaluado, también mostraba buen precio, linda naturaleza dentro; y casi en la 5ta. Avenida. Y grata fue mi sorpresa que todo era verdad; y aún mejor. La atención del personal siempre amable y dispuestos a ayudar en lo que necesitáramos. Tienen estacionamiento techado y protegido, lo cual nos dió tranquilidad porque habíamos rentado auto. Elevador. Alberca con agua templada, pero adicional un jacuzzi con agua siempre calientita y función para burbujas. Todo esto rodeados de hermosa naturaleza que en verdad te relaja y aleja del día a día. Reservé dos "Habitaciones dobles", las cuales estuvieron muy cómodas, con televisión, aire acondicionado, caja fuerte y un frigobar; que además tiene un pequeño congelador con una hielerita (eso nos hacía la vida cuando comprábamos refrescos para tomar en la habitación). E igual las habitaciones al estar rodeados de naturaleza, todo el tiempo el hermoso sonido del viento moviendo los árboles y plantas. En los pasillos hay garrafón de agua, por lo que llenábamos nuestras botellas y al frigobar. Con eso tuvimos agua fría para beber todo el tiempo. Nos topamos varias veces con un Capibara que a veces visita el hotel. No olviden subir al Rooftop. Tiene una vista increíble a la playa; con hamacas y sillas para pasar un buen rato disfrutando. Y Tip... a cuadra y media (igual sobre la 32 casi esq. con Av. 10), está "Lajam" tacos árabes. Comida rica y a muy buen precio.