Fuimos de viaje de pareja mi novio y yo y elegimos este hospedaje, estuvimos aproximadamente unas 9 noches y fue sensacional.
La hospitalidad que te brindan las personas que trabajan allí es lo mejor de todo, te aconsejan y te ayudan en todo lo posible. Los desayunos abundantes y exquisitos, todas la mañanas desayunábamos en la preciosa terraza que tienen arriba por un muy buen precio y las camareras un encanto. Si necesitábamos traslados nos lo gestionaban en segundos, e inclusive, cualquier otra cosa que pudiéramos necesitar, al instante lo teníamos.
Sin duda recomiendo hospedarse en Blanc Blue 1924, una mención especial a Roberto que ha estado pendiente de nosotros en todo momento.
Mencionar que estaba ubicado a menos de un minuto de Malecón.
Sin duda, si volvemos a Cuba repetiremos.