Es un hotel antiguo y eso genera ventajas y desventajas, los espacios son cómodos y acogedores, los colchones son muy buenos, el desayuno es ciclico pero suficiente, la maquina de cafe de la habitación es un detalle de generosidad, el recepcionista, Vincent, Es muy atento y dispuesto a hacer tu experiencia unica, los alrededores y la ubicacion son el mejor activo del lugar a 2 cuadras de union square y chinatown un par mas para Yerbabuena o Grace catedral
Me quedaría de nuevo