El hotel la verdad es que está muy bien, pero la ubicación de éste es mala. Está entre el centro de Cork y el aeropuerto, o sea, no puedes ir andando desde la ciudad porque está a unos 40 minutos, además de que está en plena carretera, y para ir al aeropuerto, tienes que coger un taxi, ya que tampoco está "al lado" del aeropuerto.