Quinta un poco venida a menos, el entorno es precioso y la limpieza es buena, pero la antiguedad del hotel hace q la experiencia no sea buena del todo. Los colchones estan al limite de la comodidad, esta bien q tiene el aire acondicionado q tu mismo puedes regular ya q las puertas y ventanas del complejo estan abiertas por el tema del covid. El desayuno buffet hay q reservar hora y te lo sirven, desayuno correcto en variedad y a destacar zumo de naranja natural.
Les faltó poner el detalle de la botella de agua, q tampoco reclamé xq no me parece importante, pero la descripcion del baño no correspondia con el q nos tocó. Ya q ponia q tenia ducha de lluvia y no lo tenia, pero tampoco me parece importante. Simplemente q es mejor no ofertar si no lo vas a dar.