En principio me dieron una habitación muy vieja y lo peor es que el colchón estaba vencido. Dormí muy mal, al día siguiente me cambiaron a una habitación que por lo menos tenía una ventana decente y un colchón aceptable, pero el cambio fue de una cama doble a una single sin descuento alguno. Está lejos de todo, con un bus que pasa cada hora y volver a la noche se vuelve muy complicado. La terraza es hermosa, así como la pileta y las vistas de Taormina, tiene aspiraciones de gran hotel, pero creo que está quedado en el tiempo. Los precios de las habitaciones son excesivos para lo que ofrecen.